Transcurrido un tiempo desde el último de los 10 talleres colaborativos en el Museo del Carmen, el equipo del proyecto Acercamiento a la metodología de Evaluación y Declaración de Significados, financiado por la Convocatoria 2020 del Fondo del Patrimonio Cultural del Servicio Nacional del Patrimonio Cultural, liderado por la historiadora del arte y museóloga, Nicole González Herrera, hace público su informe final.
El equipo del proyecto Declaración de Significados conformado por Nicole González Herrera (historiadora del arte y museóloga), Constanza Christian Rojas (Antropóloga Social), Ignacio Chávez Toledo (Fotógrafo profesional) y César Luco Contreras (Diseñador Gráfico), junto al Museo del Carmen de Maipú; se alegran en presentar los resultados de esta inédita investigación patrimonial participativa que recogió, sábado a sábado, las voces de más de cien personas que se reunieron a conversar sobre los significados del patrimonio cultural y las colecciones del museo para cada uno de ellos.
“Esencialmente la idea del proyecto fue no saber qué es lo que el Museo tiene en sus colecciones, como posesión, sino saber lo que el Museo es, como promotor de significados”, comenta Nicole González, historiadora del arte y museóloga quien estuvo a cargo del proyecto. Añade además que “trabajar con metodologías que amplían la noción de aprendizaje o de enseñanza fue clave. En algunos talleres llegamos a co-construir ideas impensadas anteriormente, por ejemplo, en el Taller de Culturas precolombinas. Entre todos llegamos a la conclusión de que la Batalla de Maipú actúa como un agujero negro en la historia de la comuna, porque de alguna forma todo cae y recae en ese gran hito fundacional, sin conectar con los otros períodos de nuestra historia”.
«Entre todos llegamos a la conclusión de que la Batalla de Maipú actúa como un agujero negro en la historia de la comuna, porque de alguna forma todo cae y recae en ese gran hito fundacional, sin conectar con los otros períodos de nuestra historia»
El proyecto contemplaba un desafío no menor, la convocatoria y la participación de la comunidad. Sobre este aspecto la antropóloga social, Constanza Christian Rojas cuenta que, «originalmente el proyecto planteó convocar a 150 visitantes a los talleres, considerando alrededor de 15 personas por cada taller, pero esta proyección debió enfrentarse con la realidad de la pandemia de Covid-19, también, la metodología planteaba trabajar con cuatro perfiles iniciales de visitantes, que eran jóvenes, universitarios, adultos y conocedores, pero tuvimos que replantearnos esa propuesta original, dejándola libre y sin perfil, concurriendo personas de distintas edades, géneros, condiciones sociales y territorios».
Comentando parte de las conclusiones contenidas en el documento de resultados, Nicole González señala que “las colecciones de Carruajes y Mobiliarios fueron las más valoradas por el público. Eso nos permitió deducir que los objetos que reflejan el desarrollo histórico en sí mismos, son los más valorados por la ciudadanía porque permiten ver, analizar y aprehender los cambios entre el pasado y la sociedad contemporánea.” Añade que, “otro aspecto clave, que vuelve muy significativo al Museo del Carmen de Maipú, es que fomenta una valoración afectiva, familiar y casi nostálgica de sus visitantes, que siempre recordaban su primera visita, su paso por el colegio, por desfiles, por ceremonias religiosas, etc. Entonces hay un terreno sentimental o emocional que puede seguir potenciándose.” En la línea de lo anterior, la historiadora del arte comparte el ejemplo de las hermanas Camila y Javiera Marambio, quienes nunca han visitado el Museo con sus papás, pero que al recorrerlo sentían su presencia, sus palabras y sus consejos.
“Las colecciones de Carruajes y Mobiliarios fueron las más valoradas por el público. Eso nos permitió deducir que los objetos que reflejan el desarrollo histórico en sí mismos, son los más valorados por la ciudadanía porque permiten ver, analizar y aprehender los cambios entre el pasado y la sociedad contemporánea.”
“Personalmente, veo como un desafío recoger este tipo de apreciaciones, dejar de centrarse en la inteligencia histórica y hegemónica, para dar pie a las emociones, a los recuerdos, a los juegos, a los movimientos, a las visitas al parque, etc. Hay que pensar más en el disfrute integral de las y los visitantes», concluye González.
Invitamos a conocer los resultados del proyecto en el siguiente documento: Declaración de Significados – Resultados